De verdad les digo que la gente es muy extraña.
Unos se van, otros regresan, otros deciden siempre no saber que hacer y se quedan parados.
Saludan y se van de nuevo sin dejar nada claro. O regresan y te confunden más.
Saludan y se van de nuevo sin dejar nada claro. O regresan y te confunden más.
Por ejemplo cuando quieres hablar para felicitar a alguien de quien no sabes nada por su cumpleaños resulta que se fue de viaje.
En fin, por eso los arañas decimos “mucho gusto y adiós” a la hora de comer.
Matamos el vínculo que une y ya no hay más que decir.
Un adiós así es definitivo.
Bueno, de hecho, siempre lo son.
Mis acompañantes sin lugar, sin duda, tenían más cosas que decir.

Click para ver más
En fin, por eso los arañas decimos “mucho gusto y adiós” a la hora de comer.
Matamos el vínculo que une y ya no hay más que decir.
Un adiós así es definitivo.
Bueno, de hecho, siempre lo son.
Mis acompañantes sin lugar, sin duda, tenían más cosas que decir.

Click para ver más
3 voces en mi cabeza:
A veces sucede así... qué se le va a hacer.
Pues si, así es el
adiós de un escorpión...
cuando se decide una a
dejar no hay como nos
convenzan a regresar...
):
Mala onda Sasori, pero la gente a veces se porta así.
Publicar un comentario